Más pronto que tarde, cada vez que la agenda lo permite reúno a un grupo de amigos para agasajarles con víveres, refrescos y un buen ciclo de cine en el sofá. Entendemos el cine como un acto social, y dado que la actividad periodística del crítico va reñida con este matiz no es sino a través de estas actividades que uno emprende en sus momentos de ocio que se logra descubrir películas nuevas en buena compañía, la cual eleva la experiencia y la contrasta. En esta ocasión, además, elaboramos una jugosa programación, con tres películas festivaleras recientemente estrenadas en Netflix. Dos de ellas, de poderosos nombres de la Historia del cine. Las expectativas eran altas, aún cuando no sabíamos demasiado de ninguna de ellas. Refugiados del frescor callejero en el calor del sofá, dilucidamos los misterios uno a uno. Y aún pese a haber una sensación generalizada de leve decepción, pudimos encontrarnos satisfechos de una jornada provechosa. Una tarde heterogénea, con propuestas muy distintas entre sí por género y tono y tres ventanas diferentes a un cine tan atado como alejado de las tendencias del hoy. Western, metacine y acción salvaje. Películas como estas aseguran que hay vida en Netflix más allá de sus mejores series.
En primer lugar, a las 17:45 de la tarde del sábado 24 de noviembre comenzamos la maratón con la película más esperada de la tarde, por ser la primera vez que unos autores consagrados se prodigaban por Netflix: La balada de Buster Scruggs, película de episodios de los Hermanos Coen planificada originalmente como miniserie que se hizo con el premio a Mejor Guión en el último Festival de Venecia. Recreadas con imágenes y sonidos, se abre un viejo libro lleno de relatos sobre el Lejano Oeste. Se nos presentan seis episodios, con el único nexo de tener lugar en la salvaje América de indios y vaqueros. Protagonizados por pistoleros, ladrones, artistas, buscadores de oro, caravanas, indios, diligencias…todos ellos habitantes de un universo tan bufo y sereno como indómito y cruel. Una miniserie de los Hermanos Coen que suponía su estreno en Netflix y que finalmente se ha visto reducida a largometraje de dos horas. Contexto que, aún así, no quita que nos hallamos ante un producto de innegable destreza en el plano cinematográfico. Los diálogos de los personajes son de nuevo muy ingeniosos. Excelente la fotografía, plagada de planos panorámicos tan bellos como los paisajes naturales que retrata, y muy correcta banda sonora. Y un ejemplo más de su maña como narradores a la hora de tejer un entramado tonal, implicando al espectador en su hierática atmósfera de humor negro, pausa y espasmódicos estallidos de cruda violencia. Los puntos fuertes del estilo coeniano están presentes, en un filme que es su mejor trabajo desde A propósito de Llewyn Davis. Pero cuando finaliza la proyección el sabor es amargo, pues los capítulos no están bien cohesionados ni ordenados, y no queda claro a dónde llegar ni que desean que extraigamos nosotros como audiencia. Estupendos los capítulos 1 y 4, pero otros como el 5 y el 6 no están a la altura, y el segundo resulta irregular. Bastante divertida, melancólicamente bella, pero incapaz de transformar sus retazos de genialidad en un todo homogéneo.
- Título: La balada de Buster Scruggs/The Ballad of Buster Scruggs
- Dirección: Joel y Ethan Coen
- Guión: Joel y Ethan Coen
- Actores: Tim Blake Nelson, Zoe Kazan, Tom Waits, James Franco, Liam Neeson
- Dirección de Fotografía: Bruno Delbonnel
- Música de: Carter Burwell
- Estreno: 16 de noviembre de 2018 en Netflix
- Duración: 132 minutos
- Web Oficial: https://www.netflix.com/title/80200267
- Nota: 7,3/10
Acto seguido, alrededor de las 20:10, llegó el momento de ver la última película de una leyenda del cine que lleva décadas muerto, una película que finalmente se ha finalizado y editado por completo cuarenta años después de que se rodara: la película Al otro lado del viento, proyecto de Orson Welles (que una vez más vuelve a estar en el calendario cinéfilo aunque, paradójicamente, por una nueva película) finalizado gracias al apoyo de Netflix y que se proyectó fuera de concurso en el último Festival de Venecia. Tras años exiliado en Europa, el legendario director Hannaford (John Huston) vuelve a Hollywood. Prepara la finalización de la última película que allí rodó, Al otro lado del viento. Una película ambiciosa que le volverá a colocar en primera plana, pero para llevarla a puerto necesita apoyo. Un apoyo que procurará conseguir en una fiesta privada, en las que se codeará con gente como el exitoso realizador Otterlake (Peter Bogdanovich). Una película rodada hace décadas cuyo montaje ha sido finalmente llevado a cabo con la supervisión de un equipo creativo que ha seguido las directrices de Welles. Aunque él, por razones obvias, no se encuentra detrás de la película que ahora vemos, la esencia de su cine se siente. Al estilo de Fraude, tenemos otro ejercicio de metaficción, un ensayo visual tan fascinante como misterioso. Se compone de grabaciones de la fiesta al estilo de un reportaje, grabaciones del proceso de entrevista y preguntas de los periodistas a Hannaford y los fragmentos de la propia película de Hannaford, encontrando por así decirlo dos películas en una, cine que habla de cine y una que habla sobre como se construye la otra. La película de Hannaford, terror setentero italiano que es todo un pre-giallo, tiene una fuerza visual fascinante y es francamente perturbadora. El estilo de la película, de planos cortos y montaje frenético, atrapa al espectador y no le da respiro, en un producto refrescante en este momento por lo que difiere del estilo visual que se practica hoy en día. Y el guión nos mantiene inquietos en una lucha sagaz de constante requiebro que con ingenio nos sitúa en una lucha de egos carismática y pícara, de diálogo vivo y matizado discurso artístico. Bien es cierto que la película se pierde en sus propios excesos, con instantes crípticos y un desarrollo argumental que se atasca en su tercera parte, previa al desenlace. Con esto y con todo, una película desafiante que se mueve en unos parámetros alejados del resto, y que recomendamos a nuestros lectores que se enfrenten a ella. Lo mejor de la cosecha del ciclo.
- Título: Al otro lado del viento/The other side of the wind
- Dirección: Orson Welles
- Guión: Orson Welles
- Actores: John Huston, Robert Random, Peter Bogdanovich, Susan Strasberg, Oja Kodar
- Dirección de Fotografía: Gary Graver
- Música de: Michel Legrand
- Estreno: 02 de noviembre de 2018
- Duración: 122 minutos
- Web Oficial: https://www.netflix.com/title/80085566
- Nota: 7,7/10
Y a las 22:20 nos adentramos en un evidente cambio de tercio con la evidente intención de aligerar la tarde y apostar por la diversión desenfrenada: la película indonesia de acción The night comes for us, bien recibida en el último festival de Sitges. Ito fue uno de los más fuertes y despiadados miembros de la sanguinaria Tríada del Sudeste de Asia Seis Mares. Sin embargo, tras una misión en la que masacraron un pueblo entero, traicionó a sus compañeros para salvar a una niña, a la que decidió cuidar una vez se retiró. No podrá esquivar la rabiosa venganza, y tendrá que acompañarse de eficaces compañeros para sobrevivir los incesantes y despiadados ataques de su antigua banda criminal y sus incontables soldados por las calles de Jakarta. Una película de acción sin frenos ni mesura al estilo de la célebre La redada asesina, bañada en coreografías de combate sin respiro y acompañada de una violencia sorprendentemente explícita y bestia, tan exagerada que, como es normal en este tipo de productos, pierde impacto y se torna en levedad pirotécnica por su poca credibilidad y trascendencia dramática. La película cumple lo que promete, y desde los parámetros del espectáculo es realmente encomiable, técnicamente muy meritoria y vibrante. Como sucesión de tollinas, poco hay que reprochar. Pero no llega a la altura de la película de Gareth Evans, y el entusiasmo crítico era excesivo. Su dilatado metraje le hizo un flaco favor, habiendo agotado sus cartas durante su primer tercio y resultando agotadora el resto del viaje. Y todo lo que no eran tortas, era deficitario. Los personajes, sus dramas, la enrevesada trama criminal de organizaciones…confuso cuando no aburrida. Una película que funciona en un ambiente cafre de desenfreno y adrenalina, pero naufraga en cualquier otro, y desmereció por completo una jornada sostenida en lo alto por sus dos predecesoras.
- Título: The night comes for us
- Dirección: Timo Tjahjanto
- Guión: Timo Tjahjanto
- Actores: Joe Taslim, Iko Uwais, Julie Estelle, Sunny Pang, Zack Lee
- Dirección de Fotografía: Gunnar Nimpuno
- Música de: Fajar Yuskemal y Aria Prayogi
- Estreno: 19 de octubre de 2018
- Duración: 121 minutos
- Web Oficial: https://www.netflix.com/title/80148162
- Nota: 5,7/10
Tres películas de rabiosa actualidad que encajaron de manera insospechada. Una de ellas no estuvo a la altura, pero las otras dos fueron dos ejemplos más, aunque modestos, de que el 2018 ha sido un gran año de cine. Tarde o temprano, la zarzuela volverá. Estas actividades de hacer comuna siempre son agradecidas.