Con la excepción de las comedias y del cine de género, pocos cines tienen peor encaje en las galas de premios que el cine de documental y en el que nos vamos a centrar hoy, el cine de animación. Al verse reducidos tan sólo a su categoría propia con un reducido número de nominados, muchas grandes propuestas circulan por esta carrera de fondo siendo plenamente ignoradas. Especialmente, de la vasta cosecha de anime japonés. Un panorama técnicamente deslumbrante y narrativamente creativo pero poco variado, ofreciendo mayormente o entregas de franquicias o melodramas de angustia adolescente. Por ello mismo, el último proyecto de Studio 4º C captó inmediatamente nuestra atención. Una película inesperada que no venía acompañado de nombres de prestigio, pero sí de cierto apoyo crítico y apreciación hacia sus virtudes visuales. Es Los niños del mar, película dirigida por Ayumu Watanabe. Un filme que nos llega de puntillas en un enero apretado, y que sigue probando el gran momento de forma de la distribuidora SelectaVisión. Ya no tenemos el placer de seguir disfrutando de nuevas obras de Studio Ghibli, pero hay tantos potenciales sucesores postulándose que nos hallamos en un gran momento para ser seguidor de la animación. Y aún con sus claros problemas, recomiendo sin fisuras esta muy lograda y sugerente película. Un viaje onírico que desconcierta con el cripticismo de su trama, pero seduce con el poderío sensorial de su apuesta. Sin duda alguna, una de las tres mejores películas de anime japonés del último año y medio. Una imprescindible para adeptos.
Días tranquilos y libres de verano. La joven Ruka no encuentra acomodo emocional entre sus compañeros de clase, y encuentra la alegría y la magia observando a poderosas criaturas marinas en el acuario de su padre. Un día establecerá amistad con el enérgico y misterioso Umi, que al igual que su hermano Sora son niños del mar, de piel muy sensible al sol y a la sequedad y que fueron criados en el océano por dugongos. El vínculo entre los tres se fortalecerá conforme se acerque la celebración del festival del mar, anunciada por una canción de las ballenas con la que Ruka se siente profundamente conectada. Océano y cielo como imágenes especulares enfrentadas. Los mares como escenario del nacimiento y fallecimiento de estrellas. Estrellas que absorben la atención de la vida marina, agujeros negros encarnados en lánguidos jóvenes. Historia juvenil de amor y vinculación sentimental entre jóvenes enraizada con una profunda conexión con el místico y hechizante mundo natural. Un filme que casa en tonos y sensibilidades con lo que estamos habituados en el subgénero, pero a su vez su propia bestia debido a la libertad con la que establece los rasgos de su personalidad. Una narración, ya desde sus primeros montajes, de una sensibilidad arrolladora. Una película sencilla en su descripción de personajes que logra con facilidad despertar ternura con la nobleza de su espíritu. La estética del filme merece evidente mención, con una animación que no destaca a nivel técnico pero difiere de la línea gráfica común en tantas otras primas. La gran virtud, sin embargo, es la extraordinaria banda sonora de Joe Hisaishi. Pero lo que eleva a la película es el poderío plástico de la sinfonía abstracta new age que brinda en un clímax abrumador.
Tras un poderoso inicio y atractivas relaciones desarrolladas, el camino que la película sigue a continuación es cuando menos desconcertante, pues desemboca en un nudo estancado y breve para cerrar, tras instantes de impacto dramático, en un prolongado clímax que abandonará a muchos espectadores por lo inescrutable y excesivo que resulta. Su coherencia conceptual es evidente, y su evolución es satisfactoria como poco a nivel emocional, pero le ayudaría para llegar a ser una gran película tener un argumento más claro, mejor definido, estructurado de manera más claro. Con todo, este crítico acepta su fiel compromiso con el riesgo.
Lisérgica, abstracta y etérea, Los niños del mar es un frenético recorrido que producirá muchas dudas durante su proyección pero deja un dulce sabor de boca una vez finalizada.
- Título: Los niños del mar/Kaijû no kodomo
- Dirección: Ayumu Watanabe
- Guión: Daisuke Igarashi
- Actores: Voces de Mana Ashida, Hiiro Ishibashi, Seishû Uragami, Win Morisaki, Yû Aoi
- Dirección de Fotografía: Sin determinar. Animación
- Música: Joe Hisaishi
- Estreno: 24 de enero de 2020
- Duración: 110 minutos
- Web Oficial: https://www.selecta-vision.com/prensa/post/los-ninos-del-mar
- Nota: 7,3/10
