Al igual que Sitges es cada año un cargamento de cine fantástico a ir consumiendo en casa o en cines durante el siguiente curso, Sundance es un arcón de cine independiente estadounidense que llega a las pantallas españolas en contadas excepciones. Películas irregulares y algo endebles, pero de interesantes premisas y simpáticos tonos narrativos. Fue la premisa lo que me hizo acercarme al filme que nos ocupa: la comedia negra de redes sociales Ingrid goes West, que se estrenó en tierras angloparlantes a finales de agosto. Pese a la vigente actualidad y vasta presencia de las redes sociales en el mundo de hoy, su tratamiento en el cine ha sido hasta ahora escaso y, a excepción de Tragedy Girls, desafortunado. Pero el punto de partido de la película daba lugar a posibilidades interesantes, y sumado a las buenas críticas apoyaron al consumo hogareño de esta rareza. Pese a mis nociones preconcebidas, uno siempre debe abrir sus horizontes hacia todo tipo de cines. Y una vez concluí el visionado solitario recapacité que, si bien no me hallaba ante una película de obligada recomendación para todos mis cercanos, se trata de un dramedia más inteligente de lo que parece que superó mis expectativas. Una película cuyo argumento la desemboca a ser chusca, y cuyo tono gamberro cae en el subrayado obvio, pero cargada de reflexiva y dura crítica ante la hipocresía virtual, no falta de tragedia y amargura.
Ingrid Thorburn (Audrey Plaza, sensacional) es una joven mentalmente inestable que sigue de manera obsesiva y enfermiza las vidas de sus ídolos de Instagram. Una vez descubra y quede fascinada con las imágenes del estilo de vida de la popular Taylor Sloane (Elizabeth Olsen), decide hacer lo que de ella dependa para ser su amiga. Se muda a Los Ángeles e imitará su estilo y costumbres para ganar su confianza, falseando su vida lo que haga falta. Pero cuando no sea aceptada como desea, perderá la estabilidad de su plan y, en consecuencia, la tranquilidad emocional. Una hipérbole viciada de las costumbres millenials de actividad en redes sociales y el superficial aparentar del contenido que comparten y de las reacciones al mismo que sus descerebrados fans tienen. Para que cale hondo la mirada crítica que hace ver la hipocresía y nocividad de estas dinámicas, elige como protagonista a una excéntrica perturbada. Y gracias al poder de este personaje, la película funciona como un reloj. Debido, además de por su descripción en guión, al estupendo trabajo de Aubrey Plaza. Y al fin tenemos más películas que hablan con conocimiento del lenguaje digital y lo integran en la narración cinematográfica de una manera precisa y fiel a la realidad, no cómo un gag paródico. Y que, además, reflexiona sobre las secuelas psicológicas que lleva una ejecución al extremo de estas devociones visuales de una manera profunda. Miles de referencias muestran un avezado conocimiento de nuestra realidad digital, y el gusto estético de la filmación y la profundidad psicológica de los temas escogidos permiten que los ajenos a las redes también puedan disfrutar del filme.
Su tema, por su propia naturaleza, no puede evitar ser banal y burdo, y el desarrollo no está exento de situaciones predecibles, conveniencias o actitudes enojosas. Y cómo buena película de dispositivo, pierde la potencia una vez se diluye la sorpresa y nos adentramos en el grueso del nudo argumental. Ningún personaje tiene el peso o el encanto de Ingrid, y aún si encaja con sus personajes muchos de los influencers de las película quedan reducidos a caricaturas. El humor es efectivo pero tan plano que sólo es simpático, pero de sencillez que pronto se esfuma. Es esta una buena película, posiblemente la mejor versión posible del punto de partido, pero del mismo modo, pese a un gran cierre y efectivos aunque forzados giros, es un filme demasiado largo para el material de partida. Y a nivel cinematográfico, aunque sin fallas, carece de elementos de interés.
Divertida, crítica y grotesca, Ingrid goes West no embelesa, pero ofrece una jugosa crítica a la idiota cultura de las redes sociales que divierte mientras da en la llaga.
- Título: Ingrid goes West
- Dirección: Matt Spicer
- Guión: Matt Spicer y David Branson Smith
- Actores: Aubrey Plaza, Elizabeth Olsen, O´Shea Jackson Jr., Wyatt Russell, Billy Magnussen
- Dirección de Fotografía: Bryce Fortner
- Música de: Jonathan Sadoff y Nick Thorburn
- Estreno: Sin fecha
- Duración: 98 minutos
- Web Oficial: https://www.imdb.com/title/tt5962210/reference
- Nota: 7,1/10
