Si hay micro-universos por los que el cine se siente fascinado, sin duda la cárcel es el que ha alumbrado una obra más prolífica. Demostraciones de pulso que, sin embargo, acostumbran a orbitar siempre la misma obsesión. Por este motivo, la anomalía que supone invertir este deseo es el núcleo alrededor del que se edifica la nueva película del ambicioso director español Rodrigo Cortés: Escape, donde se ha rodeado de una amplia selección de rostros talentosos capitaneados por un Mario Casas entregado a un personaje de conflictivo perfil psicológico y desconcertantes metas. Una suerte de tragicomedia carcelaria histriónica presentada en las galas de TVE del pasado Festival de San Sebastián y se estrena este viernes como anómala alternativa de contraprogramación a Halloween. El primer largometraje en castellano del salmantino (aunque nacido en Galicia) apuesta por la sorpresa tonal y narrativa y los resultados demuestran un desconcierto y energía que harán las delicias de muchos espectadores. Una película disparatada e intensa que recoge algunos rasgos de pericia en su puesta en escena, pero que en última instancia ofrece un navío vistoso que vaga sin rumbo, en el que todos los elementos quedan horadados en la superficie. Un inicio prometedor que se disuelve en un desarrollo estanco y sin frutos expresivos ni textuales.
La determinación infatigable de un ciudadano a no asumir ninguna decisión por sí mismo, probando el tejido social forzando todas las situaciones posibles para convertirse en un elemento a ser purgado. Una mirada nihilista y cruel hacia la naturaleza violenta del ser humano y la asistencia inadecuada a los perfiles psicológicos poco normativas que hace de la tragedia carcajada, apoyada siempre en un pulso de acción innegable. Otro ejemplo más del romanticismo cinematográfico alrededor de la figura del paria, que visita los tropos y lugares comunes del cine carcelario para darles la vuelta. Una reflexión satírica sobre los agujeros y sombras del sistema que opera en códigos clásicos del cine de espectáculo para enfrentarnos a los reflejos menos deseados de nuestra realidad diaria. La energía del reparto es contagiosa, y el contrapunto tragicómico que aporta la partitura de Víctor Reyes contribuye a darle al texto más volumen, así como para definir el absurdo tono ambiguo. La producción ejecutiva de Martin Scorsese ha habilitado al equipo a rodar con una envergadura de producción más holgada, obteniendo como fruto algunas tomas ambiciosas de cámara o secuencias de compleja coreografía logística a las que no estamos tan acostumbrados en el cine español ajeno a designios comerciales o fórmulas afranquiciados. La libertad creativa que se le puede presuponer al proyecto es uno de sus activos más fuertes, así como su sentido del humor.
Pasado la sorpresa de la extravagante premisa, el desarrollo de la narración resulta siempre tan obtuso que no llegamos nunca a presenciar catarsis en ninguno de sus frentes. Pese a acompañarle durante todo el metraje, el inestable protagonista y sus motivaciones siguen siendo un misterioso cuando concluye el largometraje, y cualquier personaje secundario con la excepción de Anna Castillo se queda en una carcasa carismática de apariciones puntuales y vínculo exiguo con el antihéroe vehemente de Casas. Tras un primer acto muy efectivo y una conclusión ingeniosa, el largo ecuador en las celdas supone una oportunidad perdida con respecto a la capacidad revulsiva que los primeros minutos de película sugerían. Incluso los estallidos mas llamativos del filme resultan livianos, nada encuentra poso ni suscita fugas de elocuencia sensorial, así como ofrecer un posicionamiento moral para con sus personajes de una tibieza decepcionante. Cine capricho, incapaz de enriquecer la experiencia que podemos sustraer de leer su sinopsis o ver su tráiler.
Ácida, vigorosa y acerada, Escape muestra el oficio de todos sus implicados y recupera a Cortés para la causa, pero la sacudida que Buried produjo hace casi dos décadas es cada vez un espejismo más difuso.
- Título: Escape
- Dirección: Rodrigo Cortés
- Guión: Rodrigo Cortés, basado en una novela de Enrique Rubio
- Actores: Mario Casas, Anna Castillo, Guillermo Toledo, Juanjo Puigcorbé, Javier Sacristán
- Dirección de Fotografía: Rafa García
- Música: Víctor Reyes
- Estreno: 31 de octubre de 2024
- Duración: 129 minutos
- Web Oficial: https://betafiction.es/cine/escape/
- Nota: 5,5/10