Este curso he empezado un Máster de crítica cinematográfica organizado por la Escuela ECAM en colaboración con la revista Caimán Cuadernos de Cine. Os dejo el quinto texto del Taller de Escritura, dedicado a explicar los ecos (las similitudes visuales y temáticas) de la saga de cómics de El incal de Alejandro Jodorowsky y Moebius en la película El quinto elemento de Luc Besson. Espero que os guste:
Ecos de El incal en El quinto elemento
Viendo Jodorowsky’s Dune (Frank Pavich, 2013), es inevitable suspirar pensando en lo fascinante que podría haber sido la versión cinematográfica que el heterogéneo artista chileno deseaba hacer de la obra de Frank Herbert. Mucho de aquel trabajo de preproducción no se ha visto reflejado en las versiones de David Lynch y Denis Villeneuve, pero fue capital para dar vida a una de las obras fundacionales del cómic europeo de finales del siglo XX: la saga de El Incal, escrita por el propio Alejandro Jodorowsky e ilustrada por Jean Giraud, mas conocido como Moebius. A falta de juzgar los resultados del próximo intento de adaptación de Taika Waititi, lo más parecido que hemos tenido hasta la fecha a un Incal cinematográfico es el largometraje El quinto elemento, dirigido en 1997 por Luc Besson.
La revista Métal-Hurlant y los cómics de ciencia-ficción franceses de los 70 y 80 fueron determinantes en la configuración del imaginario de Luc Besson, como demuestra su adaptación cinematográfica en 2017 de Valerian y la ciudad de los mil planetas. El quinto elemento, a su manera, probaba en el cine que una ciencia-ficción europea diferente era posible. Un universo ficticio más desquiciado, sexualizado y violento. Relatos con personajes reprobables y acción exuberante cuyo conflicto principal se reduce a la dialéctica entre luz y no-luz.
En ambas obras hay una fuerte carga simbólica: la confrontación entre lo masculino y lo femenino, la ascensión espiritual, los rituales como método de salvación planetaria en espacios de configuración piramidal; el individuo andrógino como receptáculo canalizador de una energía salvadora que emana en forma de luz por sus respectivos orificios…Hallamos también múltiples ecos estéticos tanto en los diseños de naves o estructuras, de texturas terrosas y reminiscencias egipcias y de otras culturas ancestrales, como en el uso de rayos de luz y color.
El imaginario de Jodorowsky no conquistó Arrakis, pero impregnó las mas extravagante obra del mainstream galo de finales del siglo pasado.
Néstor Juez