En pocos días emprenderé viaje hacia la hermosa costa vasca para disfrutar, por tercer año consecutivo, de una nueva edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián. Una edición esta que viene precedida de mucha expectación por una sorprendentemente prometedora Sección Oficial, con muchos nombres de peso. Nombres, en múltiples casos, con cuya obra previa no estaba familiarizado. Por ello vi ahí una buena excusa para organizar un nuevo ciclo en el Hogar: películas previas de directores que participen en la Sección Oficial de este año. Películas de distintos géneros, países y estilos, primeras obras o filmes de consolidación. Filmes elegidos bien por azar, bien por aprovechar la oportunidad para ver películas deseadas. Y con una excepción, fue una tarde excelente de gran cine y propuestas de marcado interés. Películas divertidas, trepidantes, sugestivas y entrañables. Un mosaico representativo de las corrientes de expresión del cine de autor de las últimas décadas. Un buen atracón de cinefilia.
Comenzamos la tarde con quizás la comedia más legendaria de la Historia de nuestro cine: Amanece que no es poco, obra fundacional de José Luis Cuerda que tendrá una secuela espiritual Fuera de concurso en Tiempo después, adaptación de la novela homónima del propio Cuerda. Teodoro, profesor en Oklahoma, vuelve con su padre y el sidecar que le ha regalado al pueblo para disfrutar de un año sabático. En este pueblo se cultivan hombres, y el único negro vive todavía con su madre (blanca) a sus 45 años. El borracho del pueblo acostumbra a desdoblarse, El alcalde regresa con una muchacha que los pueblerinos desean compartir y un grupo de jóvenes americanos llega al pueblo fascinado con sus gentes. Surrealismo desatado, un continuo aluvión de gags, chistes y chorradas de diversa índole, por lo general desternillantes. Una representación del tipo de cine de los Monty Python trasladado a nuestras coordenadas, manteniendo el absurdo y el exceso pero diferenciándolo con nuestro humor. En esta película, inteligente como tonto a partes iguales. Nada tiene censura, todo entra, y el gag está por encima del argumento, y cortamos de uno a otro sin solución de continuidad. Pero ello no oculta una calculada reflexión sobre nuestros resortes sociales a través de la sátira. La estrategia de acumulación hace que algunos sketches no encajen, perdidos en la carcajada del previo, y bien es cierto que en lo que al apartado visual se refiere la película no tiene nada que ofrecer, y no muestra ambición alguna. Plana tal vez en la variedad de emociones que transmite, pero magistral como comedia.
- Título: Amanece que no es poco
- Dirección: José Luis Cuerda
- Guión: José Luis Cuerda
- Actores: Antonio Resines, Luis Ciges, José Sazatornil, Rafael Alonso, Aurora Bautista
- Dirección de Fotografía: Porfirio Enríquez
- Música de: José Nieto
- Estreno: 17 de enero de 1989
- Duración: 106 minutos
- Web Oficial: https://www.imdb.com/title/tt0094641/reference
- Nota: 7,4/10
La venerada realizadora nipona Naomi Kawase, que competirá por la Concha con Vision, debutó en el largometraje a finales de los 90 con el que vimos a continuación: Moe no suzaku. En las boscosas montañas de la región de Nishiyoshino, una familia vive en armonía. Las obras del tren darán trabajo al padre, y su hija Michiru empieza a tener sentimientos hacia su primo. 15 años después, todo ha quedado estancado. Cine costumbrista y familiar, mundo rural y naturaleza. Familias y el fin de un modo de vida por el progreso, poesía y sensibilidad. Todos los rasgos del estilo de Kawase, tan venerado desde entonces, ya estaban aquí. Pero en esta ocasión no hay nada más. Hay una mirada diferente, con personalidad, pero no hay relato. No hay tempo, no hay emociones intensas, no hay personajes ni conflictos bien definidos. Ni la estética, la gran baza del filme, está todo lo pulida como para que el filme merezca la pena. Encontramos una secuencia sensacional para cerrar el filme, y una sensibilidad innegable para retratar los arrebatadores paisajes naturales del filme. Filme lacónico, sí, y poco ambicioso, pero viendo todo lo que vino después este filme tan sólo es un apunte. El punto bajo de la tarde.
- Título: Moe no suzaku
- Dirección: Naomi Kawase
- Guión: Naomi Kawase
- Actores: Kotaro Shibata, Yasuyo Kamimura, Sachiko Izumi, Jun Kunimura, Machiko Ono
- Dirección de Fotografía: Masaki Tamura
- Música de: Masamichi Shigeno
- Estreno: Octubre de 1997 (Seminci)
- Duración: 95 minutos
- Web Oficial: https://www.imdb.com/title/tt0119687/reference
- Nota: 6,2/10
En tercer lugar vimos la película que servidor más anticipaba, una de las obras más aplaudidas de un Kim Jee-woon cuya Illang: The Wolf Brigade esperaremos en el Kursaal con los dientes largos: A bittersweet life. Kim Sun-woo (intachable Lee Byung-Hun), gerente de un hotel, es un fiel secuaz del mafioso Kang. Este le encargará que vigile a su joven amante, y que le informe si descubre una infidelidad. Cuando los sentimientos se entrometan en la eficiencia de Sun-woo, se verá sumergido en una espiral de violencia y redención. Elegante travesía de mercenarios trajeados. Apasionante desfile de coreografías de acción realizadas con fascinante desparpajo. El filme es toda una exhibición de maestría en la realización y planificación audiovisual. Cine de seductora producción y dirección artística, y un ejemplo de cine de acción exquisito, con un pulso y una tensión constante. El manejo del lenguaje es tan habilidoso que el espectador digiere el relato con pleno disfrute y sin cuestionarlo. Un relato simple quizás, con personajes confusos y morbo efectista en su manera de filmar la violencia. Pero por ahora, dos filmes visionados del coreano, dos obras sensacionales. Ansío el momento de ver la tercera.
- Título: A bittersweet life/Dalkomhan insaeng
- Dirección: Kim Jee-woon
- Guión: Kim Jee-woon
- Actores: Lee Byung-hun, Hwang Jeong-min, Ku Jin, Shin Min-a, Roe-ha Kim
- Dirección de Fotografía: Kim Ji-yong
- Música de: Dalparan y Yeong-gyu Jang
- Estreno: Octubre de 2005 (Sitges)
- Duración: 120 minutos
- Web Oficial: https://www.imdb.com/title/tt0456912/reference
- Nota: 7,9/10
Claire Denis, realizadora con la que no había acabado de conectar, compite este año con la muy atractiva High life, y ganó mucho prestigio con el cuarto filme del ciclo: Buen trabajo. El comandante adjunto Galoup (Denis Lavant), que escribe sus memorias desde Marsella, estuvo al cargo de un grupo de jóvenes soldados en los calurosos desiertos de Djibouti. Vigilará de cerca al grupo de jóvenes de bronceados cuerpos haciendo tareas físicas en soleados parajes, y no podrá evitar sentir una fuerte atracción hacia el apuesto Sentain (Grégoire Colin). Una película formalista y narrativamente difusa, una propuesta introspectiva y sugerente, muy radical y directa en la puesta en escena que plantea. Narración de trance, levitante, de narración en off y tintes literarios, de enfoque cuasi ensayístico. Cine de estética, y estética poderosa, erotizado y sensual. Pocos tratad0s formales en cine han sacado tanto partido a cuerpos en forma de hombres. Tensión sexual, deseo y poderío físico. Película a la que, que duda cabe, le falta algo más que redondee, unos personajes matizados o argumento claro que acompañen a sus fascinantes escenarios y sugerente manera de filmarlos, estilizado con demasía pero desde una planificación austera, seca. Forma sobre fondo, sí, pero una forma tan seductora que logra que me reconcilie con Denis tras dos experiencias amargas con su obra, y que espere con expectación lo que ha logrado con Pattinson a sus órdenes.
- Título: Buen trabajo/Beau travail
- Dirección: Claire Denis
- Guión: Claire Denis y Jean-Pol Fargeau, basado en una historia de Herman Melville
- Actores: Denis Lavant, Grègoire Colin, Michel Subor, Richard Courcet, Nicolas Duvauchelle
- Dirección de Fotografía: Agnès Godard
- Música de: Charles Henri de Pierrefeu y Eran Zur
- Estreno: 03 de mayo del 2000 en Francia
- Duración: 92 minutos
- Web Oficial: https://www.imdb.com/title/tt0209933/reference
- Nota: 7,0/10
Isaki Lacuesta me sedujo con La propera pell, y que mejor manera de sumergirnos más en su cine que recuperando para cerrar una de sus obras más aplaudidas: La leyenda del tiempo, de la que doce años después nos llega su secuela, Entre dos aguas, en la costa donostiarra. En la isla de San Fernando, conocemos al carismático niño de doce años Isra, cantaor con hermano con limitaciones que tras la trágica muerte de su padre nunca podré retomar el cante. Makiko viaja a España para cumplir su sueño de ser cantaora, arte que le permitirá expresar sus sentimientos y dar rienda suelta a la tristeza acumulado y el vacío existencial que la relación con su familia. Dos historias muy lejanas, pero unidas por el vínculo único del flamenco. Un documental muy peculiar en su dispositivo, que pese a filmar personas y conflictos reales construye un relato libre en sus diálogos y tiempos, ficcionalizado. Un cine verdad que fluye despacio pero siempre construye, que con leves parámetros logra que sus actores expresen conceptos muy claros a través de su naturalidad y desparpajo. Un filme encuadrado y editado con sensibilidad y buen gusto, cuya manera de fluir dista de los preceptos que el cine de gran público predica. Película lenta que pretende dar una ventana a fragmentos de vida, y de la que podríamos ver horas gracias al carisma exorbitante de Isra, muchacho con alma y encanto excepcional. La segunda parte de Makiko, donde el flamenco es más relevante que ella misma (en contraste con una primera entregada al lucimiento de Isra) es mucho más débil que la primera, pero es imposible no ver la película inundado de alegría y emoción. Una de las películas más entrañables y enternecedoras de la Historia del Cine Español. Preciosa.
- Título: La leyenda del tiempo
- Dirección: Isaki Lacuesta
- Guión: Isaki Lacuesta
- Actores: Israel Gómez Romero, Makiko Matsumura, Francisco José Gómez Romero, Soichi Yukimune, Jesús Olvera Mota
- Dirección de Fotografía: Diego Dussuel
- Música de: Joan Albert Amargós
- Estreno: 02 de junio de 2006
- Duración: 115 minutos
- Web Oficial: https://www.imdb.com/title/tt0495138/reference
- Nota: 7,7/10
Cinco películas que evidencian cuatro grandes talentos, y cinco estilos en diferentes estadios de maduración. Cinco obras que suponen una buena razón para dar un voto de confianza a estos realizadores, reafirmar el gusto por su obra o incluso perdonarles para la siguiente ocasión. Ciclo muy gratificante, que es un mero aperitivo para un festival muy sugerente. Lo esperamos con los dientes largos.